El Elegido de Sotek

Diario de Kemmler:

Día 0:

El eslizón, de nombre Axltsa, presenta una gran resistencia a mis esfuerzos por entrar en su mente. Cada día se hace más complicado. Tiempo atrás, afectado por la derrota en la final de la Liga y en la 2ª ronda de la Copa junto con la muerte de su amigo Uazltz, el individuo estuvo a punto de sucumbir a mí. Pero, con el tiempo, los contactos se están haciendo cada vez menos frecuentes, seguramente debido a su concentración en la siguiente temporada, que está a punto de comenzar. He decidido que debo esperar al primer partido para volver a intentarlo o el desgaste podría hacer que mi frágil cuerpo se desmoronara. El esfuerzo físico que tendrá que realizar el eslizón lo hará más vulnerable.

Tengo esperanzas de que esta temporada, en un grupo tan duro como el Grupo I de la División I de la Liga Piel de Minotauro, el sufrimiento al jugar contra equipos tan experimentados haga sucumbir a Axltsa. Debo conseguir que ese individuo, el “Elegido de Sotek”, forme parte de mis Abominaciones, que están a punto de empezar su andanza en este deporte tan de moda llamado Blood Bowl, y los lidere. Llevo dos temporadas intentando hacerme con el control de su mente, sin éxito.

Noto que su Dios le está abandonando, debo seguir intentándolo.





Kemmler, el Nigromante.

Día 1:

Hoy se han enfrentado los Guardianes de Sotek a los Hachaz Zangrientaz. Había depositado grandes esperanzas en esos orcos para debilitar la moral de Axltsa, y parecía que no iban a defraudar.

Se han encargado de sobornar al árbitro, a pesar de haber entrenado duramente toda la semana. Además, uno de sus blitzers ha ingerido una poción de agilidad. A pesar de dos importantes bajas, han venido muy bien preparados, colocándose a la perfección ante el primer ataque de los hombres lagarto.

No conseguía entrar en contacto con el eslizón, y la caída del troll en la inconsciencia nada más empezar no ha ayudado. Menos mal que Kroqlantha, su kroxigor, ha caído placado cuando intentaba cargar sobre un orco negro. Esto ha ayudado a que los orcos se hayan reposicionado y hayan acorralado a Tehekailtz, que había subido a apoyar el ataque. El ágil eslizón Axltlaqs, con el ovalado en las manos, ha ido avanzando hacia la derecha bien cubierto.

Mis ataques a la mente de Axltsa se han intensificado cuando los orcos han matado a Tehekailtz pisoteándole. He podido notar su dolor, pero él no parece haber sentido mi llamada. Mientras tanto, los orcos no han dudado en buscar el contacto para evitar cualquier avance del rival. Esto ha provocado que Tza-oatl del Oro se haya visto obligado a abrirse paso para cargar contra un orco negro. El resultado ha sido que el saurio se ha ido al suelo placado por el orco y este último ha podido abrir un hueco en la defensa. El blitzer estrella de los Hachaz Zangrientaz, al intentar entrar por ese hueco, ha caído al suelo trabado por Oy del Sol.

Los saurios no han perdido ni un instante más y se han dedicado a apartar a todos los rivales de esa zona, con tal violencia que Quetcuaqteinq ha mandado a un línea a la enfermería y Oy del Sol hacía dormir a un orco negro. Así que, los hombres lagarto, ayudados por la escasa efectividad de los orcos en sus placajes, han podido avanzar pegados a la banda derecha, con una estrategia muy difícil de defender. Aún así, admirablemente, el blitzer estrella de los orcos ha intentado una carga a la desesperada. No ha habido suerte porque, en el último momento, se ha caído entre los dos saurios que cubrían a Axltlaqs.

Los hombres lagarto ya sólo han tenido que perder tiempo mientras se generaba una melé en el medio del campo y, casi al final de la primera parte, marcar el primer touchdown. Con tanto éxito por parte de los Guardianes de Sotek ni me he planteado el volver a atacar la mente de Axltsa.

La segunda parte ha deparado cosas muy interesantes, ya que los orcos han recuperado a sus dos jugadores inconscientes, y así han podido reunir diez jugadores para hacer frente a los once hombres lagarto que había plantados sobre el campo. El ataque ha empezado fuerte, dejando a Axltsa inconsciente y haciendo que varios saurios dieran con sus huesos en el suelo.

Tal empuje sólo podía ser frenado por una acción desafortunada. Y así ha sido. En cuanto el lanzador ha intentado pasar el balón al blitzer más ágil, éste ha sido incapaz de atraparlo. Gracias a ello, Axltlaqs ha podido internarse y recogerlo, apoyado por Otlpita. ¡Estos dos eslizones son realmente ágiles! Pero poco les ha durado, ya que los orcos lo han recuperado rápidamente.

Los orcos han seguido con dificultades en los placajes. En una desafortunada caída de un orco negro, se ha abierto un hueco hacia el lanzador que volvía a tener el ovalado en sus manos. Sin pensárselo, el saurio Oatltla ha cargado hacia él. La desgracia parecía inminente pero, para mi regocijo, e ha caído en el último momento, rompiéndose la cadera. Ese saurio será más lento a partir de ahora, porque los médicos parecen estar reservados para las figuras del equipo.

Poco han podido hacer ya los hombres lagarto para evitar el empate de manos del blitzer ágil, que esta vez sí atrapaba el pase de su compañero. Eso sí, a Quetcuaqteinq le ha dado tiempo a lesionar a otro rival más. Es increíble la violencia de este saurio.

Los orcos, a pesar de empatar mediada la segunda parte, han quedado muy mermados. Sólo ocho de ellos han podido aguantar en el campo para defender el último ataque de los Guardianes de Sotek. Los hinchas parecen apreciar el empaque de los orcos, porque no han parado de animarles.

La última jugada ha sido muy precisa por parte de los hombres lagarto. Mientras tres de ellos han repartido golpes en el centro, el resto del equipo se ha ido por la derecha, desmarcando a varios jugadores, y con los saurios cubriendo a Axltlaqs como eslizón adelantado. Mientras Otlpita ha esperado con el balón detrás de todos ellos. Los Hachaz Zangrientaz han tapado huecos como han podido y, en el último momento, un orco negro ha estorbado a Axltlaqs inteligentemente (algo extraño viniendo de un orco negro). Pero, al final, ha pasado lo que menos se esperaba todo el mundo. Quetcuaqteinq ha abierto un hueco y Otlpita, realizando una carrera al límite de sus posibilidades, ha marcado el definitivo 2-1. Victoria para los Guardianes de Sotek, y otro día de malas noticias para mi misión.

No he podido realizar ningún contacto con Axltsa, que además tiene la moral más alta que nunca al empezar ganando en la tercera temporada de su equipo. Nada más despertarse, se ha ido a celebrarlo con su compañero Oatlgorodon, que portaba en sus manos el trofeo a mejor jugador. Gran defensa éste saurio…

Por lo menos puedo decir que he aprendido mucho de Blood Bowl.





Kemmler, el Nigromante.

Recuerdame que le eche una mano al nigromante Kemmler en nuestro próximo encuentro...

elderet escribió:Recuerdame que le eche una mano al nigromante Kemmler en nuestro próximo encuentro...

No tío, no mates al pobre Axltsa

Día 2:

Hoy he logrado un éxito parcial en mi misión. He conseguido entrar en contacto con su mente, y a punto estuve de doblegarle.

He de dejar constancia de que, al principio, resultaba imposible. Los Guardianes de Sotek empezaban atacando la organizada defensa de Cuatro, el equipo de los esbirros del Caos. El público, que hoy ha estado muy activo, ha comenzado lanzando piedras sobre uno de los guerreros del Caos, que a punto ha estado de acabar en la enfermería. Otro de los guerreros ha quedado inconsciente por el golpe propinado por el saurio Oatlgorodon.

Todo estaba de cara para los hombres lagarto, llenándome de frustración. Pero se me había olvidado contar con el Minotauro del equipo caótico, entrenado para causar estragos en las filas rivales. Pronto ha empezado, porque al eslizón Xholtenqzh lo ha dejado inconsciente en su primera intervención, igualando así en número a ambos bandos. El saurio Quetcuaqteinq, consciente de la peligrosidad de la bestia, lo ha intentado aplastar. Pero el minotauro ha aguantado para desesperación de su agresor.

Cuatro se ha empleado a la perfección en defensa, no dejando a los rivales avanzar prácticamente. Parecía que iban a pagar sus esfuerzos cuando Kroqlantha, el kroxigor, ha matado a una cabra brutalmente. Pero el Minotauro ha seguido haciendo de las suyas, lesionando a Oatlgorodon. Si ya habían acudido a este partido con un saurio menos, ahora eran dos los que les faltaban a los Guardianes de Sotek. En esos momentos es cuando he empezado a sentir flaquear las barreras de Axltsa. Pero, escarmentado por los numerosos intentos fallidos que casi me cuestan la vida, he decidido esperar. Esto prometía.

Quetcuaqteinq ha intentado volver a aplastar al Minotauro, sin éxito de nuevo. Y cuando parecía que el ataque iba a ser frustrado por completo, Otlpita ha decidido dar el balón a Axltlaqs, que se ha metido por un hueco “imposible” y ha anotado corriendo desde increíblemente lejos. Con 1-0 ganando los hombres lagarto, la historia parecía la de siempre.

Pero no pensaba darme por vencido, estaba convencido de que los esbirros del Caos podrían serme de ayuda. Y así ha sido. Antes de acabar la primera parte, ayudados por una invasión de aficionados en el campo que ha dejado maltrecha la defensa rival, han sido capaces de anotar el empate en un ataque sencillo que los hombres lagarto han sido incapaces de parar debido a varias caídas de sus eslizones al esquivar rivales.

Con 1-1 en el marcador han comenzado los caóticos su ataque en la segunda parte, con otra invasión de campo. El público parecía realmente violento hoy. Esto ha provocado unos primeros momentos de confusión, con el porta-balón de los Cuatro en el suelo, y los eslizones Otlpita, y Huan adentrándose en campo rival para buscar el balón que rodaba por el suelo. Casi acaban marcando, ante la imposibilidad de una de las cabras de recogerlo. Cuando Otlpita se hizo con él, esquivando sin parar, los hombres-cabra fueron capaces de derribarlo al borde de la línea de touchdown. Huan de la Desesperación ha cogido el rebote, ante la incredulidad de Juaca, el entrenador de los caóticos. Pero lo han rodeado y no ha sido capaz de salir de allí, saliendo lesionado al intentar esquivar.

La suerte hoy no estaba de parte de los Guardianes de Sotek, y tras esa acción, los esbirros del Caos han resultado imparables, y han ido avanzando sin grandes problemas contra unos hombres lagarto siempre en inferioridad. Aquí han comenzado mis ataques a Axltsa, llegando a su culminación cuando la cabra porta-balón marcaba el 2-1. El eslizón estaba a punto de sucumbir, gritando desesperadamente para que saliera de su cabeza, cuando uno de sus compañeros lo ha zarandeado para que volviera al juego. Los hombres lagarto tenían una última oportunidad de marcar el empate generando una melee en el mediocampo. Pero, para mi regocijo, los caóticos han sido capaces de reorganizarse cuando el balón estaba en el aire, huyendo de la melee.

Finalmente, los Guardianes de Sotek pierden por primera vez esta temporada y espero que se convierta en una costumbre a pesar del juego que está desplegando Quetcuaqteinq, nombrado mejor jugador del encuentro.

Me retiro a descansar, obligado por otro intento frustrado (aunque signifique un gran avance). No puedo desperdiciar muchas más oportunidades. Ahora deberé centrarme en mis abominaciones, que juegan pronto su primer partido.





Kemmler, el Nigromante.

Buenas cronicas Gabillas :muy bueno:
Lastima de esa derrota, pero bueno seguro que te cuelas en los playoff

Gracias Aenor! Ya ves, a las crónicas les he dado un pequeño cambio para que no se me hiciera monótono el tema.

Lo de los play-offs ya veremos, porque menudo grupito este con 2000 de media en TV.

Aguanta Axtlsa, no te doblegues, lucha por mantener esa mente libre.

Grande Gabillas, que tus resultados superen a tus cronicas, aunque lo tienes complicado, :muy bueno:

Saludos

Como siempre, grandes crónicas Gabillas :muy bueno:

Gracias! vuelvo de viaje y me encuentro vuestras felicitaciones. Será un placer seguir escribiéndolas. Que Nuffle os lo pague con buenos partidos

Día 3:


Mis esperanzas estaban puestas en Los Traumatólogos. Visto el éxito que tuvieron los esbirros del Caos dirigidos por Juaca, esperaba que los de Ferramis terminaran de rematar la frágil barrera de Axltsa. Pero me equivocaba.

El partido ha empezado bien, porque los caóticos han empezado atacando. A pesar de la defensa perfecta que han propuesto los Guardianes de Sotek, los atacantes han ido avanzando y destrozando las líneas rivales. De hecho, he podido observar a Kroqlantha en el suelo, sin entender nada, preguntando “¿Qué tengo que hacer ahora?”. La risa se ha apoderado de mí por unos instantes.

Quedo anonadado por el poder del minotauro de Ferramis. Cada vez que se disponía a cargar contra alguien, el público ha caído en un silencio absoluto, lleno de tensión. Pero la cara de Ferramis, poco a poco, ha empezado a mostrar frustración. Convencido de que, con semejante bestia en su equipo, iba a causar numerosas bajas entre los hombres lagarto, ha tenido que observar como la primera lesión era provocada en sus filas. Nada más y nada menos que Axltsa ha sido el causante. A pesar de ello, Ferramis ha aleccionado a su minotauro para equilibrar la situación, ya que las filas de hombres lagarto estaban totalmente desmontadas por el empuje de los Traumatólogos. No sé si el minotauro se habrá sentido presionado pero en su siguiente acción a acabado en el suelo al intentar placar a Quetcuaqteinq.

Entonces, mis ganas de atacar la mente de Axltsa se han esfumado cuando he visto a los hombres lagarto empezar a ganar posiciones hacia el portador del balón, una cabra con dos cabezas y bastante ágil (podría ser un individuo digno de estudio). Los gritos de Ferramis han empezado a ser cada vez más audibles, apremiando al minotauro a levantarse. Otra vez la bestia no ha podido con la presión, y en su siguiente intento de placaje ha vuelto a dar de bruces contra el suelo. El kroxigor, viendo al minotauro en el suelo, parecía seguir sin comprender nada.

A pesar de contar con la nula aportación de Kroqlantha en el juego, la ventaja era evidente para los malditos hombres lagarto. Tza-oatl del oro no ha tardado en aprovecharlo y, en cuanto ha podido, se ha abierto paso hacia el portador para derribarlo. Con los eslizones por allí cerca, esto significa pérdida asegurada. Y así ha sido cuando Axltlaqs no ha tardado en recogerlo, para salir corriendo lejos, cubierto por sus compañeros Axltsa y Huan. Lamentablemente, los esbirros del caos no han tenido manera de alcanzarlo y éste ha marcado el 1-0 rápidamente.

Ferramis no se podía explicar cómo sus jugadores no han causado ninguna baja. La verdad es q yo tampoco, porque la cantidad de derribos ha sido sensiblemente alta. Creo que Sotek todavía protege a este grupo. Tendré que andarme con mucho cuidado.

Los Traumatólogos han salido dispuestos a cumplir los deseos de su entrenador y, en cuanto han podido, en mitad del avance para intentar el empate, han lesionado a Kroqlantha pisoteándole. Mis aplausos se han unido a los del público, que ya estaba deseoso de ver alguna lesión más. Pero tanta concentración en lesionar al kroxigor, ha supuesto una falta de concentración a la hora de tapar huecos. Y los eslizones han entrado en campo rival a por el portador del balón. Axltlaqs, esquivando incomprensiblemente los tentáculos del minotauro (me encantan estas mutaciones caóticas), ha cargado contra la cabra de dos cabezas, haciéndola perder el balón. Tza-oatl del Oro no ha tardado en acudir a protegerlo en el suelo.

Con esta situación, a los hombres-cabra no les quedaba otra opción que quitarse al saurio de encima. Pero, agobiados por la presión de los gritos de su entrenador, han vuelto a fallar, y la cabra que intentaba placar al saurio ha acabado en el suelo. Lamentablemente, esto ha dado vía libre para que Otlpita coja el balón y haya acabado marcando el 2-0 justo antes del descanso.

Desesperado ya, he decidido quedarme a ver la segunda parte sólo con la esperanza de que algún hombre lagarto muriera y así Axltsa pudiese sufrir. Pero no ha sido así. Los hombres lagarto han empezado atacando, con los eslizones aguantando las arremetidas de los hombres-cabra, que buscaban carne fresca. En vez de eso, ha sido Tza-oatl del Oro el que ha matado a una de ellas, precisamente a la autora de la falta que mandó a Kroqlantha a la enfermería. ¿Habrá sido venganza? El médico ha sido incapaz de arreglar semejante desaguisado. Bueno… quizás mi aportación económica haya tenido algo que ver. Necesito cadáveres para mis experimentos y cada día es más difícil encontrarlos recientes.

A Ferramis ya ni se le oía gritar, seguramente vencido por la frustración. Los caóticos han tenido verdadera mala suerte en lo que a lesiones se refiere.

Así, los hombres lagarto han ganado por completo la banda izquierda. Pero, de repente, se ha oído al público gritar de júbilo al ver al minotauro cruzándose su campo para cargar contra Oatlgorodon. El saurio ha quedado completamente inconsciente. Pero era tarde, Axltlaqs se ha ido con el balón pegado a la banda y bien cubierto por Otlpita y Axltsa. Pese al intento de las cabras por parar ese avance, dejando a Axltsa inconsciente, los eslizones se las han arreglado para permitir que Axltlaqs anotara el 3-0. Es impresionante la agilidad de este eslizón.

Casi sin darme cuenta, mientras tanto, habían dejado inconscientes a Quetcuaqteinq y Oy del Sol. Lástima que hayan sido capaces de despertarse antes de empezar la siguiente defensa. Al ver que Axltsa seguía durmiendo, he decidido retirarme de allí.

Según han contado en Necronomicon Sports News, los Guardianes de Sotek han acabado ganando 4-0 gracias a un espectacular derribo de Quetcuaqteinq, que ha permitido que Otlpita robara el balón y acabara marcando. Al parecer, justo al final, los esbirros del caos han conseguido lesionar a dos eslizones. Pequeño consuelo para semejante derrota. Seguramente el próximo rival de Los Traumatólogos pague los platos rotos. En la radio también alababan el gran juego desplegado por Axltlaqs, nombrándole mejor jugador del partido.

Me va a resultar muy difícil realizar mi misión si Axltsa está acompañado por tan grandes jugadores. Esperaré pacientemente mi oportunidad.





Kemmler, el Nigromante.

Buenas cronicas!! esto se merece el pergamino del poeta ese!!!!

Eso si del ultimo partido no puedo decir lo mismo jajaja, que horror!!

Jajajajaj, genial las crónicas Gabillas... veo que le has echo un pequeño guiño a las mias de la Campus
PD: Por cierto, si las obligaciones te lo permiten, ya te quiero ver inscrito en la Doblez Karacolaz

Gracias Ferramis! A pesar de la paliza aún me dedicas cosas buenas jejeje.


Juaky, t ha molao la referencia a tus crónicas eh??? jejeje, si es q estamos todos conectados . Lo de las Doblez Karakolaz, muy a mi pesar (me mola mucho jugar con goblins) no va a poder ser. No dispongo de tiempo material. Si la cosa se pusiera difícil para llenar plazas, me lo plantearía, pero dudo q eso pase

Día 4:


A día de hoy se han ido al traste todos mis avances en el asedio sobre Axltsa. Los Guardianes de Sotek han vuelto a ganar.

La verdad es que no contaba con que los Valkyrie Wings, ese equipo de nórdicos ya muy experimentado, fuera a ayudarme en mi misión. Y mucho menos cuando he visto que los hombres lagarto iban a empezar atacando. Pero, para mi sorpresa, los nórdicos de Elmonjo venían con el partido muy bien preparado. Nada más sacar, han colocado su defensa a la perfección mientras Axltlaqs recogía el balón. Si no llega a ser porque su yeti no ha hecho caso a su entrenador, podrían haberse puesto en posición de robar el balón al poco de empezar.

La misión de uno de los berserker se ve que iba a ser presionar a los eslizones, porque en seguida fue detrás de la línea de saurios a buscar víctimas pequeñas. Mi corazón ha dado un vuelco cuando he visto como mandaban al banquillo inconsciente a Quetcuaqteinq después de que éste intentara aplastar a un rival. Parece que los nórdicos habían estudiado a la perfección a su rival. La cosa prometía. Además Kroqlantha parecía no enterarse de nada, y no paraba de rascarse la cabeza pensativo. Y la cosa, a pesar de que los hombres lagarto iban avanzando poco a poco hacia la banda derecha, se ha puesto muy interesante cuando han dejado inconsciente también a Otlpita.

¡Nagash maldiga a todos los eslizones! Gracias a que uno de ellos ha cometido una falta sobre el yeti, éste último ha tenido que ser retirado en camilla por varios operarios del campo, que a duras penas han podido sacarlo de allí. El árbitro, loado sea, ha visto la infracción y, al menos, ha expulsado a Huan de la Desesperación del partido.

Por eso, los nórdicos seguían ganando superioridad numérica y, no cansados por el esfuerzo, también han dejado inconsciente a Axltsa. Ahí me he podido centrar mucho más en el partido, consciente de que la mente de Axltsa no podía ser accesible de ninguna manera. La verdad es que, hasta ese momento, los nórdicos estaban siendo bastante afortunados en todos su choques, y la superioridad numérica les estaba ayudando a acorralar a los hombres lagarto. Lástima que Oy del Sol se ha revelado y ha mandado al mejor lanzador de los Valkyrie Wings a la enfermería.

Pero los nórdicos no han dejado de fascinarme, frenando el avance rival sin miramientos. Pronto se han encargado de cometer una falta sobre Kroqlantha y dejarlo también inconsciente. El fracaso de ese ataque me ha parecido ya inevitable, y no he podido evitar frotarme las manos. Pero, por más que he mirado y vuelto a mirar la repetición en el videomarcador, no entiendo cómo Axltlaqs ha sido capaz de internarse entre la defensa rival y correr hasta la zona de touchdown marcando el 1-0. Ese maldito eslizón ha dejado a los nórdicos cabizbajos, agotados por el esfuerzo infructuoso de su primera defensa.

El público, alborotado, no ha entendido cómo esa magnífica defensa no ha obtenido premio, y la ha tomado con el árbitro. Un grupo de fans de los Valkyrie Wings le han propinado tal paliza, que no volvería a aparecer en todo el partido. Aún así, el juego ha continuado. La primera parte ha dado para poco más, ya que los nórdicos no han podido anotar en una jugada corta e intrascendente antes del descanso.

Pero mis esperanzas adquiridas desde el inicio de la primera parte no se han desvanecido, porque he visto con gran satisfacción que los hombres lagarto sólo eran capaces de despertar a Quetcuaqteinq de entre todos los inconscientes. Así los Guardianes de Sotek iban a empezar la segunda parte con un jugador menos. Ante la emoción que prometía deparar el resto del partido, los hinchas han animado con energías renovadas a ambos equipos. Claro está que yo sólo animaba a los nórdicos, exigiéndoles sangre.

Y mis exigencias pronto iban a ser satisfechas, porque otro eslizón, esta vez Xholtenqzh, caía inconsciente ante el choque de los nórdicos. Es una lástima que no hayan herido a ninguno de estos indeseables seres en todo el partido. La cosa se ha puesto muy fea cuando el lanzador nórdico no ha podido recoger el balón a la primera. Antes de darse cuenta ya tenía a su lado a Oy del Sol y dos eslizones, uno de ellos Axltlaqs, que ha recogido el balón valientemente. Pero el orgullo de los nórdicos ha permitido que hayan derribado al eslizón nada más verlo. Lo que no puedo entender es por qué han vuelto a fallar al intentar recogerlo del suelo. ¿Cómo pueden ser tan torpes? Así que en el campo nórdico se ha formado un barullo donde hasta Oy del Sol ha llegado a tener el balón en sus manos. Luego Axltlaqs otra vez, cosa que hacía crecer mi desesperación.

Pero una explosión de júbilo ha llenado mi interior cuando, finalmente, un corredor se lo ha quitado de las mismísimas manos y se ha hecho con él después de que su inútil lanzador volviera a fallar la recogida. Todos le han aplaudido cuando ha salido de allí esquivando al saurio directo hacia el campo rival, aunque con muy poco tiempo.

Los hombres lagarto se han reorganizado en defensa como han podido, después de llevar un rato repartiendo golpes a diestro y siniestro pero, incomprensiblemente, sin lesionar a nadie. El corredor, al ver la defensa de nuevo organizada, ha decidido intentar un pase al otro corredor del equipo. Pero el pase ha fallado, y no he podido evitar que la desesperación me haya hecho maldecir a ese malnacido. Creo que sus días en este deporte acabarán pronto.

Con el balón en el suelo, pegado a la banda izquierda y con bastantes defensas cerca, parecía bastante difícil que la jugada continuara. Pero el orgullo de los nórdicos ha hecho que el propio corredor que había fallado el pase intentara recoger de nuevo el balón. Lamento haberlo maldecido. Es lógico que haya fallado en su intento. Tal vez, sin mi intervención, hubiese tenido éxito. Por suerte, el balón ha acabado saliendo fuera y el público lo ha devuelto muy cerca de la zona de touchdown, con un berserker que el saurio Oatluaxtilt había sido incapaz de derribar.

A veces, las grandes cosas dependen de una sola acción de un insignificante individuo. Y ese era el caso en ese momento. El berserker sólo tenía que quitar de en medio a un eslizón y luego recoger el balón al lado de Oatluaxtilt. Lo primero lo ha hecho a la perfección, incluso sacando al eslizón del campo, para disfrute de los aficionados más radicales. Pero, ya exhausto, ha sido incapaz de recoger el balón, justo antes de que la bocina haya hecho a todos comprender que ese partido iba a acabar con el resultado de 1-0, gracias a dos grandísimas defensas y a un eslizón, Axltlaqs. Ha sido nombrado otra vez mejor jugador, cosa que me hace pensar. Debo librarme de alguna manera de él si quiero que mi misión llegue a buen cauce.

Además, me doy cuenta de que debo controlar las fuertes emociones, tiempo atrás olvidadas, que este deporte despierta en mí. Por culpa de ellas hoy he provocado una derrota que me perjudica. Espero mejores resultados el próximo día.





Kemmler, el Nigromante.

Día 5:


Hoy los Guardianes de Sotek han jugado contra los Xabieros, un grupo de humanos con gran experiencia en Blood Bowl pero los menos favoritos a ayudarme en mi misión. Así que he acudido al estadio sin ilusión para presenciar lo que, a priori, iba a ser otro día perdido para mis intereses.

Los humanos han empezado atacando, condicionados por un saque pegado a la banda izquierda, bastante lejos de donde su formación pretendía iniciar la acción. No estaba yo demasiado interesado en el juego, cuando el ogro ha pegado el primer golpe y me ha hecho prestar más atención. Los golpes de ese ser, aunque no han causado ninguna baja, eran dignos de ver.

A pesar de todo, los humanos han sido incapaces de abrir ningún hueco en la formación de hombres lagarto y, para colmo, su lanzador ha sido incapaz de recoger la pelota del suelo. Casi sin darle tiempo a darse cuenta de la situación, Quetcuaqteinq ya había abierto hueco, y tanto Oy del Sol como Oatluaxtilt ya estaban presionando y protegiendo la zona cercana al balón. Coger ese balón era una tarea complicada, pero cuando Axltlaqs anda cerca, eso cambia. El eslizón ha cogido la bola de los pies del lanzador humano sin problemas, y se ha apartado de él. Suerte que un blitzer ha llegado hasta allí y ha podido derribarle, cosa que ha animado a los humanos a reorganizarse.

Pero Oatluaxtilt no se ha andado con pequeñeces y ha apartado brutalmente al línea que pretendía cubrir el balón, dejándolo sin conocimiento durante un rato. Gracias a ello, Axltlaqs, al levantarse, ha vuelto a coger el balón para salir de esa zona. Al final los humanos no han podido evitar que ese maldito eslizón anotara el 1-0. La moral de los humanos se veía por los suelos mientras le tiraban un barril entero de cerveza Nenas Bloodweiser a la cara del línea inconsciente. A duras penas, éste se ha despertado y han vuelto a formar líneas para otro ataque.

Esta vez los humanos si han conseguido abrir un hueco, por donde han podido meterse varios jugadores, entre ellos el receptor estrella y su mejor blitzer. Los saurios han conseguido derribar al receptor, pero los que cubrían al blitzer han sido apartados y, pasándole el balón, han permitido que éste anotara el empate. Me he quedado sorprendido de las posibilidades de ese equipo, al conseguir tan rápidamente un touchdown. En ese momento he empezado a concentrarme por si surgiera alguna oportunidad de atacar a Axltsa. Con el 1-1 en el marcador todo era posible.

Los Guardianes de Sotek han vuelto a atacar y, ayudados por un touchbak que ha permitido empezar a Axltlaqs la jugada con el balón directamente en las manos, han empezado yendo hacia la banda derecha. Los Xabieros han tapado bien esa banda, pero entonces los hombres lagarto han avanzado en diagonal hacia el centro. Pero, a pesar de que la situación era complicada, los humanos no han dudado en presionar al máximo.

Gran rabia me ha dado cuando he visto como un blitzer ha pifiado un fácil bloqueo sobre Huan de la Desesperación, dando con sus huesos en el suelo, dejando a éste solo para que fuera a ayudar a Axltlaqs, que para entonces ya se había colado por un hueco y estaba en la esquina izquierda cercana a la línea de touchdown. Para colmo, Kroqlantha ha matado en el acto a un línea humano, sin miramientos. Los Xabieros, incapaces de alcanzar al dichoso eslizón, han visto impotentes cómo éste marcaba el 2-1 sin oposición.

Aún esperanzado de que otra jugada rápida de los humanos pudiese igualar el partido, me he quedado a ver la segunda parte, en la que iban a empezar atacando los hombres lagarto. Y estos se han anticipado perfectamente a la caída de la bola durante el saque. Cosa que les ha dado una pequeña ventaja para montar la formación de ataque. Ya estaban en perfecta formación, con Axltlaqs como portador de balón por la banda derecha, cuando Quetcuaqteinq ha fallado a la hora de cargar contra uno de los defensas y ha acabado en el suelo, permitiendo que los humanos presionaran a los hombres lagarto desde el principio.

Pero los saurios ya estaban todo lo calientes que puede estar un reptil, y Tza-oatl del Oro propinaba un fuerte golpe a su mejor blitzer, dejándolo sin sentido. Esto ha sido como una señal para los eslizones, que se han ido hacia la otra banda, donde nadie podía atacarles. Pero el receptor estrella de los humanos ha ido detrás de ellos. Quetcuaqteinq, nada más verlo, se ha lanzado contra él con mucha violencia y lo ha dejado también inconsciente. No podía hacer otra cosa que lamentarme de las pérdidas que estaban sufriendo los humanos.

Y Kroqlantha, que no parecía seguir el ritmo de sus compañeros, se ha quedado un rato parado. Seguramente estaría pensando hacia donde iban a ir finalmente los eslizones, que ahora volvían a la derecha, desquiciando a los humanos. Por suerte, Oatlgorodon se ha caído solo placando en el medio del campo y esto ha permitido que el ogro se sumara a la presión sobre la banda derecha. Esto ha obligado a la formación de hombres lagarto a expandirse mucho más con los eslizones de nuevo por la izquierda.

Los humanos, agotados ya de tanto cambio de banda, confiaban en que, por lo menos, el ogro causara alguna baja. Pero éste ha estado cerca de equivocarse. Aliviados por la capacidad del ogro de recordar los entrenamientos, deben de haber perdido la concentración, y uno de los líneas ha fallado estrepitosamente en su placaje, dejando al equipo a merced de la contraofensiva de los hombres lagarto.

Aquí ha llegado el fin de todas mis esperanzas. Los saurios han empezado a repartir duros golpes mientras los eslizones se iban solos pegados a la banda izquierda. Oatluaxtilt ha roto la rodilla de un blitzer, que ha sido llevado a la enfermería para la atención sanitaria. Kroqlantha ha dejado inconsciente a otro rival y Tza-oatl del Oro también. Y entonces Quetcuaqteinq, experto en este tipo de situaciones, no ha dudado en aplastar al lanzador estrella rival. Su cuerpo, machacado contra el suelo no hubiera servido ni para uno de mis experimentos. Huelga decir que los médicos ni han intentado arreglar tal desaguisado. Al momento, la mayoría de sus compañeros han parecido perder las ganas de continuar. Seguramente él era uno de los baluartes del equipo.

Tras todo esto, los hombres lagarto ya tenían la situación más que controlada, a pesar de que un blitzer ha intentado una carga desesperada, cayendo nada más esquivar la cola prensil de Kroqlantha de cabeza al suelo. El resultado, el mismo que sus compañeros: la inconsciencia. Poco más quedaba por ver. Mientras me dirigía a la salida, Axltlaqs ha anotado el definitivo 3-1.

Debo hacer algo con ese eslizón, o va a hundirme en la más absoluta de las miserias. Y, para colmo, también está Otlpita, que ha realizado un gran partido y se ha llevado el trofeo a mejor jugador del partido. Nunca pensé que unos simples eslizones fueran a darme tantos problemas. Debo de pensar en algo pronto.






Kemmler, el Nigromante.

Muy buena la crónica Gabillas, vaya partidazo se han marcao tus lagartijas otra vez, has destrozado a los Xabieros. Kemmler tiene que tener un cabreo de los buenos

Juaky1976 escribió:Muy buena la crónica Gabillas, vaya partidazo se han marcao tus lagartijas otra vez, has destrozado a los Xabieros. Kemmler tiene que tener un cabreo de los buenos

Kemmler deberá centrarse más en su experimento, y esperar otra ocasión con Axltsa, jejeje.

Día 6:


No debo perder la esperanza. Lo acontecido hace unos días no debe hacerme abandonar mis planes. Si el Faraón Kesubi y su cohorte han decidido que el Blood Bowl no es un buen sitio para comenzar la conquista del mundo, yo no debo ceder a la desesperación.

El grupo de momias y esqueletos de los khemri eran mi mayor esperanza para destrozar a esos hombres lagarto. Los Nuevo Amanecer acudieron puntuales a su cita con los Guardianes de Sotek. Y ahí estaba yo, en la grada, ansioso por ver correr la sangre fría de esos reptiles. Todo parecía normal, a pesar de que, para mi extrañeza, veía conversar mucho a los dos entrenadores en la banda.

Cuando los Guardianes de Sotek realizaron el saque, Eldereth (el entrenador de los khemri) hizo una señal a sus jugadores. Estos, sin vacilar y encabezados por las momias, abandonaron el campo uno por uno, dejando al público boquiabierto. El campo quedó solamente ocupado por el equipo de Axltsa y por el árbitro, que no pudo hacer otra cosa que dar la victoria a los Guardianes de Sotek, pasados unos minutos.

Han pasado varios días desde que ocurrió, y no había encontrado el momento de reflejarlo en mi diario hasta ahora. Tras largas horas de meditación ante este duro golpe, he decidido que debo concentrarme en mis Abominaciones durante unos días. Dejaré a un lado el seguimiento a Axltsa para volver con más fuerza en una oportunidad más propicia. Estoy seguro de que acabaré teniendo éxito, sólo es cuestión de tiempo.






Kemmler, el Nigromante.

Día 7:


Han pasado muchos días. Aburrido de los fracasos en mis experimentos, decidí volver al estadio a ver el octavo partido de los Guardianes de Sotek, que tras una jornada de descanso, han vuelto a la acción. Los encargados de hacerles frente eran, esta vez, los Orckrulez BBC del entrenador Kalitri. Aunque no demasiado bien clasificado en la tabla, este equipo plagado de orcos especialistas en causar lesiones era una gran baza para generar el dolor necesario para intentar otro ataque a Axltsa.

La cosa no podía empezar mejor, y nada más empezar con los orcos atacando uno de los orcos negros ha acabado con la vida del saurio Oatltla. Algo así me ha hecho saltar del asiento, aunque pronto he vuelto a sentarme al ver que uno de los blitzers orcos fallaba al intentar recoger el balón. Acostumbrado a estas situaciones, no me ha hecho falta ni mirar para saber que pronto aparecerían allí dos eslizones. Y así ha sido, el mismísimo Axltsa acompañado por Axltlaqs ha aparecido al lado del balón. Pero los orcos han reaccionado bien, y han derribado rápidamente al Elegido de Sotek, que se ha tirado contra el balón. La mala suerte (o buena para mí) ha hecho que, tras varios rebotes, el balón cayera en las manos del orco.

Tza-oatl del Oro, consciente de la necesidad de apoyo de los eslizones, se ha abierto paso para cargar contra ese orco, pero sin mucho éxito, ya que sólo ha sido capaz de empujarle un poco. El discípulo de Kalitri no ha tardado en quitarse de encima a Axltlaqs, dejándolo contusionado y fuera del partido. En la misma acción ha sido de alejarse corriendo del saurio Tza-oatl. La cosa no podía ir mejor, con una muerte y una baja importantísima en las filas de los hombres lagarto. En ese momento he decidido empezar los preparativos para comenzar el ataque mental.

Con los orcos avanzando por la banda izquierda, los saurios han tenido que subir en agresividad, y Oy del Sol ha dejado inconsciente a un orco negro pronto. Los hombres lagarto han frenado el avance orco como han podido, con Tza-oatl del Oro y Axltsa intentando estorbar por la espalda del equipo rival, y otros dos eslizones tratando de tapar los huecos que se dejaban los saurios por delante. Así se ha llegado a una situación en la que dos orcos han conseguido atravesar las líneas lagartas con el balón en las manos. Pero, en ese momento, Oy del Sol y Oatluaxtilt se las han arreglado para bloquearles el paso recolocándose, y al final se ha frustrado la situación con Quetcuaqteinq derribando al portador del balón en medio de un gran barullo.

El balón, rodando entre el barullo, no ha tardado en ser recogido por Otlpita, que se ha ido con él muy lejos, mientras Kroqlantha, que no había hecho nada en todo el partido, ha tapado el paso a los pocos orcos que se veían capaces de llegar a por el eslizón. Lo demás es algo a lo que ya empiezo a acostumbrarme. Otlpita ha marcado el 1-0, y con ese resultado se ha llegado al descanso.

Sabiendo que los Guardianes de Sotek estaban con un saurio menos y sin Axltlaqs en sus filas, he decidido quedarme a ver la segunda parte, con la esperanza de que mis preparativos mentales pudiesen servir para algo. El saque orco ha caído muy cerca del medio del campo. Pero los hombres lagarto se las han arreglado para iniciar un ataque por la derecha, con Otlpita portando el balón hacia esa zona.

Los orcos han tapado a la perfección esa banda. Pero, aprovechando que Oy del Sol dejaba a otro orco negro inconsciente en la otra banda, el ataque se ha desplazado hacia el otro lado, dejando a los orcos con escasas opciones de repetir la defensa en ese sitio, gracias también al estorbo que ha supuesto Huan de la Desesperación, más adelantado que el resto de su equipo. Tza-oatl del Oro ha abierto un hueco definitivo por la izquierda, por el que se han ido Otlpita, Oy del Sol y él mismo muy pegados a la banda. A pesar de la agresividad orca, que ha ocasionado la baja por inconsciencia de otro eslizón (Tenquaxotl), Otlpita ha podido marcar plácidamente el 2-0, acabando con toda esperanza de éxito por mi parte.

Por curiosidad, he decidido ver el partido hasta el final. Y en el siguiente ataque orco las cosas no han ido mucho mejor, ya que nada más empezarlo, un pase fallido de su lanzador ha dejado el balón en disposición de que los hombres lagarto lo robaran y se fueran por la banda derecha, con la gran mayoría del equipo orco por la otra banda. Además Tza-oatl dejaba a un línea inconsciente. Y aunque pronto desapareciera la superioridad numérica, con un eslizón llamado Gorodon cayendo también inconsciente, Otlpita ha sido capaz de colarse por un hueco inverosímil para acabar marcando el 3-0 en una carrera impresionante.

Con 3-0 ya sólo me quedaba la esperanza de ver a los orcos marcar un touchdown, aunque sólo fuera para herir el orgullo de la excelente defensa de hombres lagarto. Y, al menos, eso sí ha sido posible. Gracias a un fallo de Kroqlantha, los orcos han podido abrir un gran hueco, no sin antes lesionar a otro eslizón, para pasar al goblin que con muchos apuros había conseguido desmarcarse. Otro fallo, o más bien acierto del goblin al conseguir que el último placaje de Axltsa sobre él acabara con el eslizón por los suelos, ha permitido que el propio goblin marcara el 3-1 definitivo justo al final del partido.

Tras este partido, he comprendido muy bien que el potencial de los eslizones de este equipo es casi ilimitado, ya que ni la lesión del mejor ha impedido que apareciera otro, en este caso Otlpita, jugando al mismo nivel que su compañero. Aún no sé que podré hacer para hundir a este equipo. Al menos he disfrutado al ver como los comentaristas del partido rendían homenaje al saurio caído, dándole el trofeo a mejor jugador. Un poco de tristeza puede venir bien para que Axltsa sufra.





Kemmler, el Nigromante.

Día 8:


Necesitaba ayuda, al menos eso pensé cuando acudí a otro nigromante para pedirle apoyo. Khamul es su nombre, y Los Nazguls su equipo. Ellos iban a ser el rival de Los Guardianes de Sotek, y me prometieron que se iban a emplear a fondo si le conseguía una poción de fuerza a uno de sus tumularios y empleaba. También debía encargarme de contratar a un hechicero para que interviniera con alguno de sus hechizos en el partido.

Y hoy he llegado al vestuario del equipo de no-muertos con la poción, que ha funcionado a la perfección. El hechicero esperaba en la butaca de al lado de mi sitio. La estrategia de Los Nazguls iba a ser empezar defendiendo. Y así ha sido. Los Guardianes de Sotek, que han incorporado un nuevo saurio de nombre Oytla, han recibido el primer saque sin demasiados problemas. Además el primer golpe de Quetcuaqteinq ha dado como resultado un esqueleto a la enfermería. Por suerte, Kroqlantha no ha tenido el mismo éxito y, cuando ha querido abrir hueco con una penetración, ha acabado en el suelo junto con su rival. Mientras, los principales defensores de Los Nazguls han esperado atrás.

Parece ser que Kroqlantha no terminaba de entender su fallo, porque ha tardado mucho en levantarse. Mientras tanto, sólo un necrófago con bastante fuerza se atrevía a golpear a cualquier saurio que se adelantara. Pronto Los Nazguls han descubierto que su estrategia no era la más acertada, porque los indefensos esqueletos caían lesionados con facilidad, esta vez dos a manos de Quetcuaqteinq y Oatlgorodon. Por eso deben de haberse echado encima de los atacantes en cuanto ha ocurrido esto.

Desbordados por esto, gran parte del ataque, incluido Otlpita con el balón, ha buscado un cambio de banda, pasando de la izquierda a la derecha en un abrir y cerrar de ojos. Uno de los necrófagos, al intentar seguirles esquivando saurios, ha caído al suelo quedando inconsciente por el golpe. El touchdown era ya casi una realidad. Pero Kroqlantha hoy tenía muchas dudas, porque se movía más bien poco y olvidaba al resto de jugadores con facilidad.

Yo no podía entender la fragilidad de los esqueletos de Khamul. Otro más ha caído lesionado por Quetcuaqteinq. Menos mal que, en seguida, uno de los necrófagos ha lesionado a Oatlgorodon para todo el partido. Pero las bajas en el equipo no-muerto han seguido creciendo. Hasta la momia (recordemos que hoy el equipo no-muerto ha llegado muy mermado, con una momia menos de lo normal) era atacada, cayendo inconsciente para todo el partido. Y hasta Huan de la Desesperación se encargaba de cometer una falta sobre otro necrófago para dejarlo totalmente inconsciente. Que un eslizón también provocara bajas me estaba empezando a dar dolor de cabeza.

Creo que alguien ha avisado al entrenador Gabillas de la existencia de un hechicero en la grada. Por eso debe de haber ordenado a Otlpita que le diera el balón a Axltlaqs para que marcara el 1-0 pronto. Lo que no esperaban es que la mayoría de esqueletos han regenerado sus heridas y el equipo de Los Nazguls han podido hacer una formación de 11 jugadores.

El saque de los hombres lagarto ha sido muy malo, y ni siquiera ha caído en el campo rival. Esto ha propiciado que un necrófago haya salido con el disparado por un hueco que le han abierto en la banda izquierda. En ese momento, me he girado hacia el hechicero y le he hecho la seña acordada. El conjuro ha sido rápido, y efectivo. Un rayo ha caído del cielo para derribar a Quetcuaqteinq, el único saurio capaz de frenar esa internada. Aún así, con la ayuda de los eslizones, aún había una posibilidad de que el ataque fracasara. Por suerte, Otlpita se ha caído en el último esfuerzo y no ha podido tapar el hueco crucial. El necrófago sólo ha tenido que quitarse a Axltlaqs de encima y marcar el 1-1 justo antes del descanso.

La cosa no podía ir mejor, teniendo en cuenta que ahora iba a atacar el equipo no-muerto. Pero las anteriores experiencias me han enseñado a ser cauto, y no iba a intentar nada hasta no verlo seguro.

Los hombres lagarto han empezado realmente rápido su defensa y, antes de que sus rivales siquiera pudiesen moverse, han cargado contra las primeras líneas de ataque. Por suerte, este saque también ha sido defectuoso, y el balón ha acabado en lugar seguro, las manos del necrófago porta-balón. Y han iniciado el ataque por la derecha, donde había menos saurios.

Los hombres lagarto se han recolocado como han podido, excepto Axltsa, que se ha caído al intentar esquivar a los necrófagos. El avance ha seguido por esa banda, pero los hombres lagarto respondían ferozmente. Un esqueleto ha vuelto a caer lesionado, pero esta vez por un eslizón. Esto para mí, como nigromante, ha empezado a ser indignante. Además el saurio Oatluaxtilt ha dejado inconsciente a uno de los tumularios, consiguiendo casi acorralar a los necrófagos y el balón. Pero, en ese momento, los reptiles han caído presa de su mayor defecto. Y no es otro que la poca inteligencia de su kroxigor. Kroqlantha, más pendiente de contar los espectadores presentes en el partido que de defender, se ha olvidado por completo del necrófago más fuerte, y ha dejado que su compañero, que conseguía esquivar a Oatluaxtilt, le entregara el balón, marchándose con él en las garras hasta la otra banda, a punto de marcar.

En ese momento, he perdido contacto con la mente de Axltsa. El otro tumulario lo había dejado inconsciente al quitarlo de en medio violentamente para que pasara su compañero con el balón. Así que, me he dedicado plenamente a ver los detalles del partido.

Sólo Oytla, podía ser capaz de llegar a ese necrófago, ya cubierto por Axltlaqs, y no ha dudado en lanzarse a por él. Pero el ímpetu del novato ha podido con él, y justo al final de la carrera ha caído exhausto a los pies del rival. El necrófago no ha tenido muchos problemas en quitarse al eslizón de encima y marcar el 1-2. ¡Se repetía la jugada! No cabía en mí de gozo, por fin volvían a ir perdiendo Los Guardianes de Sotek. Lástima que la inconsciencia de Axltsa me impidiera intentar nada.

Pronto ha empezado la última jugada, con los no-muertos saliendo espectacularmente rápido en su defensa. A un esqueleto incluso le ha dado tiempo a ponerse debajo de la caída del balón antes que a los eslizones. Dos necrófagos se han quedado más atrás, bloqueando a dos eslizones. Por desgracia, el esqueleto ha sido incapaz de coger el balón, y Axltlaqs ha acabado quitándoselo de los pies para llevárselo al centro del campo con sus compañeros abriendo hueco. Otro esqueleto ha acabado inconsciente y, para mayor pesadumbre, uno de los necrófagos se ha equivocado al placar a los eslizones más rezagados y han acabado ambos en el suelo.

Ya no ha habido forma de parar el avance de hombres lagarto por la izquierda, incluso con Tza-oatl del Oro lesionando a otro esqueleto y Oytla desquitándose y sacando a otro del campo para disfrute de los aficionados más radicales. Lo único positivo de esta jugada han sido las lesiones (aunque fueran sólo contusiones) de los eslizones Huan y Xholtenqzh. Porque Axltlaqs, pegado a la banda y cubierto por Kroqlantha y Oy del Sol, no ha tenido más problemas para marcar el 2-2.

Pero aún no pitaba el árbitro el final, aún podía pasar algo. Pero, al final, ambos equipos exhaustos, han sido incapaces de hacer nada más que hacer un par de placajes antes de finalizar el partido. 2-2 ha reflejado el marcador cuando ambos equipos abandonaban el campo atónitos por ver como nombraban al eslizón Tenquaxotl mejor jugador del partido.

Al menos he de reconocer que hoy he disfrutado viendo como los hombres lagarto han sido incapaces de ganar. Espero que esto se repita más veces, porque presiento que mi oportunidad está muy cerca.






Kemmler, el Nigromante.

Día 9:


Hoy no he acudido demasiado entusiasmado al campo, a pesar de haber hecho el esfuerzo de buscar tiempo entre mis labores para acudir al partido, que había sido cambiado de fecha en varias ocasiones por la organización. El motivo de mi falta de entusiasmo no era otro que el rival de los Guardianes de Sotek. Un conjunto de sucias ratas, actualmente, no me parecía que fuese el rival más idóneo para hacer sufrir a los hombres lagarto. Y los Ratificadores del entrenador Calltroop no esperaban que fuesen una excepción.

El partido ha empezado con los hombres lagarto haciendo el primer ataque. Y pronto han empezado a abrirse hueco por la banda izquierda golpeando duramente a todo hombre rata que se les acercara, aunque sin hacer excesivo daño. Los skaven han esperado agazapados atrás hasta que los hombres lagarto han invadido completamente su campo. En ese momento, comandados por la rata ogro, se abrían un hueco en la formación rival para presionar al portador del balón, Axltlaqs. Cada día me duele más decir ese nombre.

Pero los hombres lagarto no han tardado en mandarlos a todos al suelo, impidiendo cualquier intento de robo. La melee ha sido ya inevitable para los skaven, que se han visto arrasados por la fuerza del rival. Quetcuaqteinq ha abierto las hostilidades sacando a un skaven del campo, que ha quedado inconsciente por la paliza propinada por los fans que poblaban una banda. Con los hombres lagarto avanzando poco a poco, la primera lesión, sorprendentemente, ha caído en Axltsa, que intentaba entretener, junto con el saurio Oatluaxtilt, a tres skaven. Pero parece que a Quetcuaqteinq no le ha gustado esto, y se ha lanzado a aplastar a uno de los lanzadores rivales, rompiéndole el cuello.

Hoy un ejército de médicos poblaba el banquillo de Los Ratificadores, pero ninguno de ellos ha sabido como recolocar el cuello dislocado del lanzador, que ha acabado muriendo en sus manos, ante los improperios lanzados por el público. “Matasanos” era la palabra más escuchada en la grada en esos momentos. Pero no iba a ser el último.

Con los hombres lagarto avanzando más y más, Oatluaxtilt ha dejado a otro hombre rata sin vida. Y uno de los médicos no ha hecho otra cosa que golpearle el pecho con unas palas eléctricas para reanimarle. Pero lo único que ha conseguido ha sido chamuscarle, provocando que el olor a rata asada llegara hasta mis propias narices. Para entonces, el clamor del público ha empezado a ser preocupante.

Uno de los blitzers, a la desesperada, ha intentado cargar contra Otlpita para presionar, pero ha caído exhausto a los pies del eslizón. Acto seguido, Oatlgorodon ha dejado inconsciente al corredor que presionaba por detrás a Axltlaqs. La cantidad de bajas de este partido estaba siendo todo un espectáculo. Luego Oy del Sol ha dejado a otro skaven inconsciente. Parece que las intenciones de los Guardianes de Sotek eran claras. Mantener la posesión y causar el mayor número de bajas en el rival. Pero la rata ogro se ha resistido hasta el límite a permitirlo, y no ha tardado en aplastar a Otlpita, mandándolo directo a la enfermería.

Aún así, los hombres lagarto han seguido manteniendo la posesión, e incluso ayudados por los intentos desesperados del rival, que acababan lesionándose solos como lo ha hecho un blitzer al intentar esquivar a Quetcuaqteinq. Las bajas no paraban, hasta Tenquaxotl, el eslizón, dejaba inconsciente a un corredor haciéndole una falta que el maldito árbitro no ha visto. La indignación se apoderaba de mí pero, cuando ya todo parecía que iba a ser un paseo reptilesco, la rata ogro se ha abierto paso hacia Oy del Sol, y lo ha conseguido sacar del campo. Una veintena de aficionados ha hecho falta para propinarle una seria paliza al saurio, que ha tenido que acabar en la enfermería. Esto me ha animado un poco, pero no ha evitado que Axltlaqs, maldito sea mil veces, marcara el 1-0.

Con el descanso tan cerca, me he levantado de la butaca, dispuesto a buscar un puesto de refrescos, pero he sentido como un insensato sentado a mi lado me agarraba el brazo. Sólo odio había en mi mirada cuando me he girado hacia él. El insignificante humano que me miraba no hacía otra cosa que señalar al campo. De mala gana me he vuelto a mi asiento y he visto algo sorprendente. Los skaven estaban iniciando una gran melee alrededor de un saurio, volteándolo de un lado a otro contra su propio corredor. Con el saurio ya derribado y el corredor adelantado, le han dado el balón, y éste ha corrido una distancia increíble y, esquivando hasta en tres ocasiones a un eslizón ha acabado en la zona de touchdown, marcando el 1-1 ante el rugido del público, que ha ovacionado la jugada.

De vuelta del descanso, y ya con mi refresco (y otro para mi vecino) me he sentado dispuesto a ver el ataque skaven de la segunda parte. La cosa pintaba bien, y con Axltsa en la enfermería podría traerme una buena oportunidad. Y más viendo como los skaven despertaban de su inconsciencia, consiguiendo formar una alineación de once jugadores.

Pero los hombres lagarto, nada más sacar, han colocado su defensa a la perfección, y han evitado cualquier jugada fugaz que pudiesen tener preparada los skaven. Aún así, estos han intentado abrir hueco por la banda derecha, dejando al eslizón Gorodon inconsciente en el empeño. Pero la fuerza de los hombres lagarto ha vuelto a imponerse, e incluso un línea acababa en el suelo al intentar placar el solo a Kroqlantha.

Los hombres lagarto han tapado la banda derecha confiados. Pero la estrategia se ha ido al traste cuando el kroxigor se ha quedado quieto en el medio pensativo, dejando pasar a los rivales en el proceso. Por ahí mismo ha pasado el lanzador con el balón pero, por desgracia, se le ha resbalado de las manos cuando iba a darle el pase definitivo a un blitzer desmarcado en la otra banda. Los Guardianes se han dado la vuelta como locos para cubrir ese balón. Y, aún en la banda derecha, Quetcuaqteinq se ha encargado de seguir provocando bajas en los skaven. El crujido del cráneo de ese hombre rata ha sido estremecedor. Aún me estoy preguntando cómo ha podido sobrevivir a semejante golpe. Pero, por primera vez en la historia, Axltlaqs ha cometido un error. Tras esquivar a su defensor con dificultades, ha sido incapaz de coger ese balón, que ha quedado a los pies de Kroqlantha.

Al ver esquivar a un corredor skaven, incluso me he levantado del asiento. Éste lo ha cogido de los pies de Kroqlantha, se ha apartado de la cola prensil del kroxigor, y ha realizado un pase perfecto al blitzer desmarcado. ¡Pero el maldito blitzer ha sido incapaz de atraparlo! Mientras me dedicaba a patear mi propio asiento, los hombres lagarto han terminado de controlar la situación y, finalmente, Axltlaqs se ha hecho con el balón. Además Oatluaxtilt sacando a un rival del campo, y Kroqlantha golpeando aun línea causaban otras dos bajas. Y, a pesar de los esfuerzos de la rata ogro derribando al kroxigor y el corredor presionando al eslizón, el avance del balón ha sido inexorable hasta llegar a la banda derecha, donde quedaban pocos hombres rata.

Con Quetcuaqteinq divirtiéndose a lo grande causando otra baja más, la rata ogro ha decidido arriesgar y lanzarse hacia la dichosa banda derecha pero, agotada, ha caído al suelo. Ya nada se podía hacer y, tras un intercambio de jugadores inconscientes, Axltlaqs ha mantenido la posesión hasta el final, cuando ya ha marcado el definitivo 2-1.

Me faltan palabras para expresar mi frustración pero, lo más alarmante, es que me empiezo a acostumbrar. E ironías de la vida, el mejor jugador para los expertos ha sido Huan de la “Desesperación”. Pero me consuela saber que a los Guardianes de Sotek les quedan ahora los partidos más duros de toda la temporada. Espero que me sirvan.








Kemmler, el Nigromante.

Día 10:


Otra oportunidad más. He acudido al campo convencido de que los Nurgle del entrenador Tharsis iban a causar un terrible sufrimiento a los Guardianes de Sotek, pero no tanto como para ganarles. Mi esperanza era ver el equipo de hombres lagarto destrozado y sin posibilidades de afrontar los play-offs con garantías.

Y el partido ha empezado muy prometedor, ya que, nada más sacar, un guerrero de Nurgle ha dejado inconsciente al saurio Oytla en primera línea. Y, acto seguido, un pestigor ha hecho lo mismo con Huan de la Desesperación. Los hombres lagarto con dos efectivos menos sí que podían ser presa fácil. Así que me he agarrado al asiento emocionado y con esperanzas renovadas, a pesar de que el pestigor causante de la baja de Huan se caía por el esfuerzo al intentar recolocarse en la formación.

Confiado de mí, no me he dado cuenta de algo muy importante: el balón quedaba suelto y desprotegido. No ha tardado Axltlaqs en aparecer allí, detrás de la primera línea de los 13 Monos y recogerlo. Por suerte, la apariencia asquerosa de los guerreros de Nurgle hacía dudar a Kroqlantha a la hora de golpear. No han tardado en derribar a Axltlaqs, pero el balón ha vuelto a quedar suelto y cerca de Quetcuaqteinq. El saurio, aún rodeado de jugadores rivales, se las ha arreglado para apartar a un pestigor de la zona, dando una oportunidad a Axltlaqs de volver a efectuar una recogida. Pero el eslizón, que tiene a todos acostumbrado a lo mejor, no ha sido capaz, increíblemente.

Las bajas han seguido apareciendo hasta el punto de ver a Kroqlantha siendo retirado del campo también inconsciente. Con otro pestigor recogiendo finalmente el balón los Nurgle parecían estar encarrilando muy bien el partido. Y muy encarrilado, ya que los hombres lagarto eran incapaces de causar ninguna baja incluso haciendo faltas. Así que, el pestigor confiado ha ido hacia su derecha atravesando la línea de mediocampo. Pero los malditos hombres lagarto han reaccionado justo a tiempo.

Parece ser que habían pecado de algo de exceso de confianza, porque en un momento han dado la vuelta a la situación. Primero Quetcuaqteinq lesionaba a un pestigor, luego Oatlgorodon ha dejado a un guerrero de Nurgle inconsciente y, para rematar, entre los tres eslizones que quedaban en el campo se las han arreglado para alcanzar al portador del balón y derribarlo. Otra vez el balón ha quedado suelto, y los 13 Monos no han podido hacer otra cosa que reorganizarse e intentar presionar a los eslizones. Por suerte la presión ha funcionado, porque Axltlaqs, otra vez increíblemente, ha fallado al intentar la recogida de balón. Esto ha provocado que mi objetivo, Axltsa, haya sido golpeado cayendo en las redes de la inconsciencia.

La bestia de Nurgle, que estaba haciendo un buen partido apoyando a los guerreros de Nurgle contra los saurios, no debe de haber comprendido muy bien la situación porque ha dejado de moverse completamente, como si no estuviese jugando el partido. ¡Maldita sea! Sin su ayuda al equipo, Axltlaqs que por fin cogía el balón, ha podido encontrar un cobijo detrás de Oy del Sol y Oatluaxtilt. Pero el maldito gusano seguía sin moverse, y un pestigor desesperado se ha visto obligado a intentar una carga contra el eslizón pasando por una zona defensiva rival con tan mala suerte que se ha caído al intentar esquivar a un saurio. La caída lo ha dejado inconsciente, igual que a su compañero guerrero de Nurgle al recibir un gran golpe de Oy del Sol. ¡Maldita sea la fuerza de ese saurio! En poco tiempo la situación se ha dado la vuelta por completo. De hecho, Axltlaqs se ha podido escapar hacia el campo contrario y marcar el 1-0 antes del descanso.

Durante ese tiempo han podido despertar todos los inconscientes de Nurgle. Pero también lo han conseguido Kroqlantha y el Elegido de Sotek, así que la segunda parte se ha iniciado en igualdad numérica de once contra once. Con los Guardianes de Sotek atacando en esta segunda parte me esperaba ya una victoria cómoda de estos asquerosos hombres lagarto.

Pero la defensa Nurgle se ha lanzado contra los rivales mucho antes de que el balón cayera al suelo tras el saque. Incluso la carga de uno de los pestigor se ha llevado por delante a Axltsa, dejándolo inconsciente de nuevo. Lo negativo es que la maldita bestia de Nurgle seguía sin moverse, y no ha podido apoyar a sus compañeros, que buscaban el juego de contacto. Así que los saurios se han podido quitar de encima a la mayoría de rivales, permitiendo a Axltlaqs (que había recogido el balón otra vez con problemas) se resguardara detrás de la primera línea.

Pero los Nurgle han insistido en el contacto, e incluso han lesionado a Oatlgorodon en el empuje. Por desgracia, los Guardianes de Sotek cuentan con Quetcuaqteinq, que ha reducido a un pestigor, dejándolo inconsciente. Al final, entre todos los hombres lagarto han abierto un hueco, por donde ha pasado Axltlaqs acompañado de Otlpita y Xholtenqzh, que se han ido pegados a la banda izquierda. Un pestigor ha tenido que cargar contra Otlpita, lesionándolo y tapando el hueco por donde pretendían avanzar los eslizones. Los rotters han acudido a tapar también, pero uno de los dos que lo han intentado ha querido correr demasiado y se ha caído en el intento. Esto ha permitido que Tza-oatl del Oro se abriera paso para cargar contra el pestigor, dejando un pequeño hueco para Axltlaqs. El eslizón se ha colado esquivando al único rotter que le impedía el paso y ha marcado el 2-0. Otro día más, el resultado iba a ser negativo para mis intenciones.

La siguiente defensa los hombres lagarto la han planteado con tres eslizones en primera línea y con todo el poder defensivo esperando bastante atrás. Los Nurgle han pensado que los rivales trataban de reírse de ellos y se ha iniciado una pequeña pelea entre miembros de los distintos equipos. Yo pienso que esta defensa era más fruto de la ausencia de Oatlgorodon y para evitar bajas innecesarias de cara a los play-offs. Todo se vuelve en mi contra con este equipo…

Los Nurgle, en la reanudación, ya estaban enfurecidos, y han golpeado con dureza contra los eslizones, dejando a Xholtenqzh inconsciente. Han avanzado con gran decisión por la derecha y, al ver a los hombres lagarto tapando esa zona, han ido avanzando hacia el otro lado con seguridad. A los Guardianes de Sotek parecía preocuparles más asegurar los golpes que robar el balón, tanto que Axltsa ha sido capaz de acabar con la vida de un débil rotter. Los 13 Monos, intentando devolver los golpes, han tenido menos éxito, y un guerrero de Nurgle se ha “estampado” contra Kroqlantha, resultando contusionado gravemente. Ha habido un intercambio de golpes con varios inconscientes hasta el final del partido, justo cuando el pestigor portador del balón ha marcado el definitivo 2-1. Los Nurgle han tenido además la mala suerte de no poder regenerar sus últimas lesiones. El agotamiento ha sido fatal.

Me quedo impresionado de la violencia de los golpes de este partido. Pero la resistencia de los hombres lagarto ha evitado cualquier baja que pudiese servirme para siguientes partidos Los Guardianes de Sotek afrontarán los play-offs con la plantilla al completo y con un Oatluaxtilt con la moral renovada, gracias a que ha sido elegido mejor jugador del partido.

Sólo me queda la esperanza de que Axltlaqs vuelva a tener la torpeza que ha tenido de hoy, que ha estado a punto de costarles cara a los hombres lagarto.






Kemmler, el Nigromante.

Día 11:


Estoy convencido de que los play-offs serán muy propicios para mis planes. Y, a pesar del resultado del partido de hoy, el camino se abre ante mí. Después de lo que he visto en el estadio esta tarde nada puede fallar ya.

Las Ratillas Apestosas han acudido al campo acompañadas de mucha gente, dos médicos, un hechicero y unas chicas muy monas que llevaban unos barriles de cerveza en un carro. Supongo que tanta parafernalia sería más para disimular el hecho de que acudieran sólo con once jugadores en la plantilla. Mal pintaban las cosas para mí desde el principio pero, como siempre, me he resignado a ver otro partido más. Cualquiera se extrañaría de mi fe inquebrantable en este plan, pero yo sé que tendré éxito tarde o temprano.

Los Guardianes de Sotek han realizado un saque directamente fuera del campo, así que el balón ha sido ofrecido al lanzador para iniciar el ataque. Todos los skaven han avanzado su formación hacia la derecha, excepto el lanzador, que esperaba atrás pacientemente. Los hombres lagarto no han tardado en tapar esa misma banda, aunque Kroqlantha parecía seguir pensando hacia qué lado ir, cosa que han aprovechado los hombres rata para cambiar de banda, dejando en problemas a la defensa rival. Con tal ventaja, uno de los líneas ha cometido una falta sobre Tza-oatl del Oro, pero el maldito árbitro no ha dudado en expulsar al infracto. Parece que ese inútil quería preservar el juego limpio que se estaba llevando a cabo hasta el momento, sin lesiones.

Los hombres lagarto se las han arreglado para tapar los huecos, pero los skaven se las han arreglado para abrir uno a pesar del descontrol de su rata ogro, que se negaba a obedecer órdenes. Entre forcejeos y placajes al límite han propiciado que uno de sus corredores, al recibir el balón se colara directo hacia la zona de touchdown rival, pero el esfuerzo ha acabado por hacerle caerse de bruces. He tenido que observar incrédulo cómo Axltlaqs recogía el balón perdido de la misma zona de touchdown y quedaba cubierto por varios compañeros, haciendo imposible a los skaven marcar ya.

El público se ha empezado a impacientar, porque no se veían ni lesiones ni touchdowns. Aunque la cosa se ha empezado a animar cuando los saurios se han puesto violentos, con Quetcuaqteinq intentando aplastar a sus rivales y Oatlgorodon dejando a un blitzer inconsciente. Pero por parte de los skaven la cosa estaba muy negra ya, con la rata ogro negándose a todo desde el suelo para desesperación de Tossferina, su entrenador. Uno de los más grandes de esta liga para mi opinión, aunque eso no viene a cuento. Lo que si importa es que los hombres lagarto han decidido avanzar por la misma banda que ocupaban sus rivales con el simple objetivo de arrollarlos parece ser.

Ante semejante panorama, los skaven se ponían nerviosos y caían víctima hasta de sus propios placajes. Eso, y con Quetcuaqteinq entrando en calor dejando inconsciente a otro rival, ha dado como resultado un avance continuo de los hombres lagarto, a pesar de que la rata ogro intentaba acosarles, ya dispuesta a participar. Cuando parecía imposible parar ese avance, los hombres rata han sacado uno de sus ases de la manga. El hechicero ha lanzado una bola de fuego que ha dejado hasta a cuatro hombres lagarto en el suelo, entre ellos al portador del balón. Toda una lástima que Huan de la Desesperación haya quedado en pie, porque, esquivando un placaje de uno de sus rivales, se ha mantenido cerca del balón. Y en el mismo momento en que uno de los corredores skaven se escapaba con él se ha lanzado en plancha a sus pies, haciéndole un placaje digno de los grandes partidos.

Así que, con el balón otra vez en el suelo, sólo ha hecho falta que los saurios se encargaran de apartar al lanzador de en medio para que Axltlaqs lo recogiera de nuevo y se lo entregara a Otlpita, desmarcado. El eslizón sólo ha tenido que correr sin oposición para marcar en el último momento el 1-0. Lamento profundamente que, en mi interior, haya disfrutado con una jugada tan emocionante. Debo meditar profundamente sobre esto.

La segunda parte ha traído consigo lo que parecía que sería el ataque para que los hombres lagarto sentenciaran. Y en seguida ha empezado a resultar un hecho, cuando Oy del Sol lesionaba a la rata ogro, que ha sido retirada para que uno de los médicos la atendiera en la banda. Además, Quetcuaqteinq ha dejado a otro skaven inconsciente. Lo de este saurio no es normal, ¡que efectividad!

Con siete jugadores ya, los hombres rata han tapado el avance de los hombres lagarto (con Otlpita como portador) como buenamente han podido. Los Guardianes de Sotek han avanzado en diagonal de derecha a izquierda lentamente, sin prisas y con gran superioridad, y eso a pesar de que Kroqlantha no terminaba de tener claro qué hacer.

La cosa se ha complicado aún más para los defensas cuando los hombres lagarto han hecho un repentino cambio de dirección, llevándose por delante a uno de los corredores. Si no llega a ser por la intervención del segundo médico, hubiera muerto. Aún así no ha quedado muy sano. Entonces los atacantes se han dedicado a mantener la posesión. Mientras, Kroqlantha se estaba dedicando a observar como curaban a ese skaven, ante las carcajadas del público. En ese momento yo tenía de todo menos ganas de reírme.

A punto de levantarme ya de mi butaca para irme algo ha llamado mi atención. De repente, un corredor se ha internado ágilmente en las mismísimas entrañas de la formación rival para cargar sobre el portador del balón, con tal éxito que lo ha derribado y se ha quedado con el balón en sus manos. Pero aún quedaba salir de allí, y eso no ha sido posible, ya que en el último momento se ha caído entre tanto rival, perdiendo de nuevo el balón y quedando lesionado.
Pero esto me ha dado una gran idea. Tanto tiempo dedicado a estudiar cómo controlar mentalmente a un eslizón tenía que servir para algo. Sé de buena tinta que controlar la mente de un skaven es mucho más fácil, así que he trazado en segundos las líneas de un nuevo plan, que me preparará el camino para futuros partidos. El contacto ha sido rápido, y el skaven no ha opuesto prácticamente resistencia. Las órdenes han sido claras: destruir a Axltlaqs. Confiado de que funcionara he cortado pronto la conexión.

En ese momento me he encontrado con Axltsa mirándome fijamente desde el campo. Me temo que haya detectado mi presencia, aunque no me explico cómo ha sido capaz. El eslizón no paraba de mirarme, e incluso ignoraba a su compañero, que trataba de darle el balón para que marcara. Entonces, como yo me esperaba, el skaven ha usado sus habilidades para esquivar todo y penetrar directamente contra Axltlaqs, con tal éxito que lo ha lesionado, dejando el balón a los pies de Oytla. ¡El control mental ha tenido un gran éxito! Como ya me esperaba, uno de los corredores, con una mano gigantesca, ha recogido el ovalado, pero era imposible salir de allí con la posesión, y se ha caído en el intento.

Los rugidos de Quetcuaqteinq se han podido oír en kilómetros a la redonda seguramente. La furia del saurio ante la visión de su jugador estrella lesionado por unas viles ratas ha sido brutal, y se ha llevado por delante a uno de los corredores, rompiéndole las costillas. Pronto se ha calmado, porque su compañero Otlpita ha recogido el balón perdido y ha acabado marcando el definitivo 2-0 cuando quedaba poco tiempo.

En la reanudación sólo ha dado tiempo a un par de golpes y un pase de los skaven exitoso, así que no hay mucho más que contar, excepto que la defensa realizada por Oatluaxtilt ha sido valorada muy bien, y éste ha sido nombrado mejor jugador del partido.

Me he retirado satisfecho a mis dominios, consciente de que la lesión de Axltlaqs para el próximo partido de semifinales puede ser un gran paso en mi misión. Pero estoy preocupado. ¿Cómo es posible que Axltsa haya detectado mi presencia si no estaba atacando su mente? Algún extraño vínculo se debe de haber formado en mis anteriores ataques que provoca esto. Debo estudiarlo.






Kemmler, el Nigromante.

Unas crónicas dignas del partido, me han gustado mucho, solo te ha faltado poner lo siguiente:

Entre forcejeos y placajes al límite han propiciado que uno de sus corredores, al recibir el balón se colara directo hacia la zona de touchdown rival, pero el esfuerzo ha acabado por hacerle caerse de bruces.

Los gritos desesperados del entrenador han puesto los pelos de punta de todo el estadio, no habia oido tal sarta de improperios en toda mi extensa vida, un halo de resignación y desesperación se podia ver alrededor de Tossferina y aunque por norma general esos sentimientos potencian mi mente en este caso habría deseado que hubiera sido en Gabillas.

Y te sobra lo siguiente:

Tossferina, su entrenador. Uno de los más grandes de esta liga para mi opinión

Creo que te has pasado, sólo soy un entrenador mediocre con muchisima suerte en momentos puntuales, entrar 2 veces seguidas dentro de una caja (a 5-6) y derribar al portador a dado es tener una suerte increible.

La verdad es que el partido no lo di por perdido hasta el 2-0, todavia tenia esperanzas de poder empatar y llegar a la prorroga, aunque evidentemente era muy dificil conseguir varias tiradas imposibles seguidas , en fin nos veremos en la temporada siguiente y espero que en unas condiciones mas igualadas que te tengo ganas